Alexander Jiménez… como el “Ave Fénix”

Alexander Jiménez y su mamá, Luz Mila Ramírez, a quien le dedica todos sus triunfos. Foto cortesía álbum familiar.
Alexander Jiménez y su mamá, Luz Mila Ramírez, a quien le dedica todos sus triunfos. Foto cortesía álbum familiar.
  • El deportista del Equipo Bogotá ganó muy joven un Campeonato Mundial de Natación con Aletas, llegó a mayores y volvió a lograrlo. Tuvo una mala racha en su rendimiento; se recuperó, resurgió y volvió con todo para afirmarse como uno de los mejores nadadores del mundo.

Bogotá, octubre 11 de 2024.- Los hinchas de la Fiorentina, equipo de la Primera División del fútbol italiano, crearon una frase de triunfo que hizo historia, cuando el equipo descendió de categoría (a Segunda) en la temporada 1992-1993, y logró el ascenso dos años después (1994-1995), siendo –además-, protagonista del ‘Calcio’ y llegando a torneos en Europa: “Caerse es común a todos… reivindicarse con gloria es un honor de pocos”.

Esa frase le cae como anillo al dedo al deportista del Equipo Bogotá y de la Liga de Actividades Subacuáticas de la capital, Alexander Jiménez Ramírez, luego de volverse a coronar campeón mundial de natación con aletas.

Jiménez logró hace poco en Carry Le Rouet, Marsella, Francia, dos títulos mundiales más para su cuenta (lleva 6 individuales) -en los 1.000 y 5.000 metros superficie-, y un subcampeonato -en el relevo 4x1.000 metros mixto-, lo que lo convierte en uno de los mejores nadadores con aletas del mundo.

“Estoy muy feliz; es la primera vez que gano dos oros en el mismo Mundial. Hemos trabajado fuerte pensando en esto, en repetir en los 1.000 metros y por fin conseguir el título en los 5 mil. Gracias a Dios, que me permitió ganar los 5 mil metros, hacía rato quería lograrlo. Y en el relevo la dimos toda y fuimos segundos, pero igual, estamos felices. Muchas gracias a todos por su apoyo”, dijo Jiménez.

Súper Alexander

Muchos lo conocen como el isleño, y siempre dicen que es de San Andrés Islas. Sin embargo, la verdad es que Alexander Jiménez Ramírez vino a este mundo el 21 de septiembre de 1993 (hace 31 años) en New York, Estados Unidos, en el hogar de Juan Carlos Jiménez y Luz Mila Ramírez, y tiene una hermana -Jaymie, dos años menor que él-.

Su señora madre, siendo de la isla, regresó a su tierra cuando Alexander tenía casi seis años. Allí, él aprendió a nadar en el mar, contra las olas y la corriente, por lo que siempre que compite en aguas abiertas, se siente “como pez en el agua”, porque lo lleva en la sangre.

Un cazatalentos de la natación, Alejandro Sierra, lo vio alguna vez y lo vinculó a su club, y lo pulió; pero al ver las magníficas condiciones de Alexander, con permiso de doña Luz Mila -cuando el joven tenía 15 años-, se lo llevó para Antioquia en 2008.

Y en 2010, tras destacarse en varios eventos nacionales, logró en Palma de Mallorca, España, su primer título mundial, en categoría juvenil, en los 6 kilómetros en aguas abiertas, derrotando al ucraniano Oleksandr Odynokov (plata) y al francés Thomas Muia (bronce).

En Medellín estudiaba en el Colegio Ferrini, pero pidió permiso para poder terminar el bachillerato en su “tierra”, en la isla de San Andrés, donde se graduó en el Colegio Luis Amigo, con sus compañeros y amigos de toda la vida.

Alexander y el presidente de la Federación Colombiana de Actividades Subacuáticas, William Peña. Foto Fedecas.
Alexander y el presidente de la Federación Colombiana de Actividades Subacuáticas, William Peña. Foto Fedecas. 

En 2013 llegó a Bogotá, se vinculó a la Liga de la capital y al IDRD, entró a estudiar Bioingeniería en la Universidad El Bosque. Ya en categoría mayores, fue subcampeón en los 6 kilómetros en Yantai, China, en 2015, detrás de su ídolo, el italiano Davide De Ciegle, y por delante del ruso Roman Maletin. Y en 2016, ganó en esa misma prueba en aguas abiertas, su primer título orbital en esta categoría y segundo personal, en el Mundial de ese año celebrado en Volos, Grecia, superando a De Ceglie y a Maletin, segundo y tercero respectivamente.

Después vino –hasta la pandemia del Covid 19-, un bache, una época no muy pródiga en resultados internacionales (triunfos), que llegó a hacerlo pensar sobre su futuro; pero, como el ave fénix, resurgió en 2022, en 2023 volvió con todo y ahora en 2024 se ratificó como uno de los mejores del mundo. Por eso, le cabe la frase en mención.

“Estoy muy feliz. Soñaba con esto, porque uno no sabe cuándo es la última vez; pensaba que, si mi carrera terminara hoy, fuera así, en lo más alto del podio. Lo mejor es que hubo un punto donde creía que los resultados al máximo nivel no se iban a dar. Pero hay momentos en que uno nada más con corazón que con piernas, se recurre también a la experiencia para frenar el ímpetu de las nuevas generaciones… y se dan las cosas, por fortuna”, dijo refiriéndose al mal rato que pasó y al haber vuelto a lo más alto del podio.

En 2022 en Viverone, Italia, ganó el título en los 1.000 metros superficie, y el bronce en los 5 kilómetros. En 2023, volvió con todo y fue medalla de bronce en los 5 kilómetros, ganando también oro en el kilómetro, superando en el remate al ucraniano Oleksii Zakharov y el griego Marios Armoutsis.

Y ahora, en 2024, Jiménez se hizo a su primer oro en los 1.000 metros superficie, consiguiendo su tercer título mundial consecutivo en la prueba (9:05.36 minutos), superando a los griegos Evangelos Nikolaidis (plata con 9:11.95 m) e Ilias Kalfidis (bronce con 9:15.41 m).

Posteriormente ganó los 5 kilómetros superficie, la prueba más larga de los mundiales, la cual que deseaba ganar porque ya había sido segundo dos veces. Triunfó con un tiempo de 44:33.65 minutos, derrotando de nuevo al griego Nikolaidis (plata con 45:43.01 m) y al turco Derin Toparlak (bronce con 46:02.70 m).

Además, Alexander ganó la medalla de plata en el relevo mixto 4x1.000 metros superficie, integrando la cuarteta nacional junto a la también bogotana Laura Valentina Saavedra, y a los vallecaucanos María Clara Lopera y Alejandro Hurtado.

“Nadando rápido”

Este último resultado se dio “porque es un duro, tiene un chip especial”, según cuenta su mamá. Eso lo dice debido a que donde vive no pude entrenar bien, no lo dejan utilizar la monoaleta, por lo que debe hacerlo en bialetas o sin nada, para mantenerse en forma; por ello, cuando puede, va a un lago que le queda relativamente cerca, para nadar con la monoaleta; además, hace gimnasio.

Y cuando tiene tiempo, viene a Colombia, entrena tres semanas “y vuelve a retomar su nivel de inmediato, como si hubiera entrenado todo el tiempo. Es impresionante. Mire cómo le fue en el Mundial”, comentó doña Luz Mila.

Además, ha sido múltiple campeón nacional, de Juegos Nacionales, de Juegos de Mar y Playa, además de haber ganado en Juegos Bolivarianos, y haber conseguido medallas en otros eventos nacionales e internacionales, ayudando a la ratificación de Colombia como potencia mundial en este deporte.

Alexander se fue a vivir a New York, donde es biomédico y está haciendo una maestría en informática. Es muy serio para todo (deportes y estudio), muy competitivo, perfeccionista y ganador -por eso cuando no triunfa no la pasa bien-, es tranquilo, al punto de que cuando va a viajar, apenas una hora antes de salir empaca sus cosas para llevar.

Jiménez tiene en su cuenta 18 medallas en campeonatos mundiales, siendo 8 de oro, 5 de plata y 5 de bronce.

Y dice con orgullo y voz de campeón, que “todas las medallas siempre se las dedico a mi mamá, ella ha sido mi soporte, mi todo en mi carrera. Tiene una enorme colección de medallas, y ahorita le acabo de dar tres más… ya no le van a caber en la vitrina ja ja ja ja”.

 

Carlos A. Gracia B.
Periodista deportes
OFICINA ASESORA DE COMUNICACIONES IDRD – BOLETÍN 266